Si recibió un diagnóstico de cáncer, está en tratamiento o recuperándose, es posible que sufra discapacidades de corta o larga duración que afecten su acceso y uso de la vivienda.
La Ley de Vivienda Justa (FHA) es una ley federal que prohíbe la discriminación en la venta, alquiler o financiación de viviendas por motivos de raza, religión, país de origen, género y discapacidad.
Según la FHA, una persona con discapacidad es aquella con una afección física o mental que limita considerablemente una o más actividades fundamentales de la vida diaria. Las actividades fundamentales de la vida diaria son aquellas que una persona normal puede realizar con poca o sin dificultad. Por ejemplo:
- Caminar
- Ver
- Hablar
- Escuchar
- Respirar
- Ocuparse de uno mismo
- Concentrarse
- Dormir
- Realizar las principales funciones corporales
La definición de discapacidad también incluye a las personas con antecedentes de afecciones de este tipo o cuando se considera que las padecen.
Las personas elegibles para la protección en virtud de la FHA tienen derecho a solicitar cambios razonables relacionados con la vivienda. Estos cambios se denominan “adaptaciones y modificaciones razonables”.